Esta quedando al descubierto algo que muchos analistas han venido revelando: en Colombia hay enemigos muy poderosos que no están interesados en que reine un ambiente de entendimiento, de diálogo y de paz entre todos los colombianos. Derrotar en las urnas esas tendencias es un gran reto hacia el futuro.
Conocer la verdad es un elemento fundamental para reconciliarnos a través del perdón; no hay otra vía distinta para que en el país se pueda recuperar la ilusión de una paz que cada vez se nota más esquiva.